LOS PACIENTES DE CASTILLA Y LEÓN LE DAN UN NOTABLE A LA SANIDAD
Castilla y León ocupa el tercer lugar en el índice de satisfacción de sus ciudadanos con los servicios sanitarios, de acuerdo con los resultados del Barómetro Sanitario 2011 del Centro de Investigaciones Sociológicas, que hoy se ha hecho público. La sanidad de la Comunidad obtiene una puntuación de 7,06, sólo por detrás de Asturias y Navarra, y mejorando el cuarto lugar obtenido en los dos años anteriores. También hay que señalar que ocupa el primer puesto entre las comunidades pluriprovinciales.
Desde las transferencias, el índice de satisfacción con los servicios sanitarios en Castilla y León se ha incrementado todos los años; así, en el año 2002 la puntuación era de 6,13, mientras que en 2011 se ha alcanzado el 7,06. Se trata de segunda comunidad en la que más se ha incrementado la valoración respecto a la sanidad pública, con un aumento del índice de satisfacción de un 15% en estos años.
Esta valoración está por encima del promedio nacional en todos los ámbitos asistenciales. Así, la puntuación de Atención Primaria es de 7,55 frente al 7,33 del conjunto de España; en Atención Especializada se alcanza un 6,98 frente al 6,87 nacional, y en Urgencias la puntuación de Castilla y León es de 6,50, mientras que la media española es de 6,11.
Hay que destacar que también a lo largo de estos años ha mejorado la percepción de cada uno de los ámbitos asistenciales. Así, en 2011, Castilla y León se encuentra en cuarta posición en cuanto a porcentaje de encuestados que piensan que la hospitalización ha mejorado, y en tercer puesto en cuanto a los que creen que tanto la Atención Primaria como las consultas con especialistas han mejorado con respecto a años anteriores.
Por otra parte, los castellanos y leoneses muestran una clara predilección por el sistema sanitario público frente a la sanidad privada. Los resultados del Barómetro ponen de manifiesto que un 71,9% de los encuestados acudiría a centros públicos de Atención Primaria, y el 63,55% elegiría un hospital público frente a uno privado en caso de tener que permanecer ingresado. Asimismo, el 61,4% de los ciudadanos prefiere ser atendido en un servicio público de urgencias. Todos estos indicadores se sitúan también varios puntos por encima del promedio nacional.