DEPORTES

El Vilken Mañanes, plagado de juveniles, arrastró una primera mitad muy mala

escudo ventorrillo fVENTORRILLO FS 8.- Iván Buxía, Berto, Puertas, Matos y Martín. Luego jugaron, Javi Failde, Manu, Alberto Buxía y Andrés.

escudo at benaventeVILKEN MAÑANES 2.- Tomy, Kun, Álex, Chuso y Zorro. Luego jugaron, Josico, Ángel, Samu, Pedro y Kiko.

Árbitro.- Otero Calvo y Vilas Martínez. Amarillas para el local Martín y el benaventano Kun.

Goles.- 1-0 Martín (11´), 2-0 Andrés (13´), 3-0 Andrés (17´), 3-1 Pedro (18´), 3-2 Ángel (30´), 4-2 Martín (32´), 5-2 Javi Failde (33´), 6-2 Manu (37´), 7-2 Javi Failde (37´). 8-2 Javi Failde (39´).

atletico benavente
Foto.- Ventorrillo F.S

No vale el decir que el Vilken viajaba casi con el equipo juvenil a tierras gallegas, que casi fue así si tenemos en cuenta que los ferreteros Pedro, Ángel y Kiko tuvieron que completar la convocatoria de Calero. No vale decir que faltaron muchos jugadores importantes, que también fue el caso. Esa no es justificación alguna para que el cuadro de Calero haya regresado de esa manera goleado, los tres últimos goles encajados cuando se arriesgaba de portero jugador, ya que enfrente había un equipo que llevaba tres semanas de derrotas consecutivas y además estaba también con lo puesto.

Además mirar el desangelado pabellón hace intuir el interés que la afición coruñesa tiene en el equipo, en este sentido el Atlético Benavente es un privilegiado, por lo que descender el equipo de categoría sería un castigo para una afición como la benaventana entregada y alabada por todos los rivales que pisan la Rosaleda.

El equipo de Calero creo que está suficientemente preparado para afrontar la situación en la que se encuentra, con jugadores que han demostrado en el primer tramo de liga que pueden tutear a cualquier equipo. El problema está en la cabeza de esos jugadores que ven el peligro a sus espaldas y que jornada tras jornada se hunden más. Cuando sepan “olvidar” el supuesto de una nueva derrota y afronten cada partido como un choque de diversión volverán a ser el Vilken que no hace mucho fueron.

Bien es cierto que el mazazo de perder a un puntal base como Koeman, ganándose la vida lejos de esta ciudad, se ha dejado notar en un grupo con una relación casi perfecta entre ellos, que Ito también ha encontrado lugar en el que ganarse el cocido y no puede estar comprometido al cien por cien con el equipo por ese motivo, que la economía del club local no es ni por asomo semejante a la de cualquier club de esta categoría y que impidió en estas navidades incorporar jugadores de casa de la talla de Sergio Simón, Javi Pintado o los hermanos Cala que juegan divirtiéndose en la liga de veteranos de fútbol sala en Zamora, o la pérdida en las últimas jornadas de un hombre gol como Malaguti por lesión.

Ayer en La Coruña el Vilken no fue ni por asomo el equipo que de él se espera, quizá derrotados de antemano y encomendándose a que los Chuso, Kun o Zorro tuvieran un gran día. Los fontaneros se encontraron además con un equipo al que la fortuna le sonrió en este choque, con hombres que habitualmente no estaban nada cómodos en cancha como Javi Failde o Andrés que llevaron el peso del equipo gallego hasta la victoria.

Los benaventanos no fueron un gran obstáculo en defensa durante la primera mitad, facilitando mucho las cosas al rival para que se pusiera con un tres a cero con goles Martín y Andrés por partida doble. Josico y Ángel fueron los que más intentaron acortar diferencias a un marcador abultado en los primeros diecisiete minutos, aunque finalmente fue el juvenil Pedro el que viera portería empujando un balón suelto en el área gallega y ante la pasividad defensiva del club local. Con ese marcador llegaba el descanso.

En la segunda parte el Vilken salió con mejor cara y empezó a acorralar a un Ventorrillo que se había dormido tras una suculenta ventaja. Subió la presión y solamente las intervenciones de Iván Buxía evitaron que los benaventanos levantaran el partido. Ángel hacía el segundo y el cuadro de Calero empezó a creer que era posible enmendar la mala primera parte, pero cuando más lo intentaba llegaba el cuarto local que minó las esperanzas atléticas y que además un minuto después rompían cualquier mínimo resquicio.

Con un 5 a 2 y siete minutos por delante a los fontaneros no les quedaba otra que quemar las naves y se plantearon utilizar el quinto jugador en algo que no solamente no dio frutos sino que además terminó con una goleada que hace mucho daño.

Al Vilken le restan todavía ocho jornadas, 24 puntos por jugar, en una lucha contra el reloj. Sus jugadores deben de entregarse en todos y cada uno de esos partidos como si les fuera la vida en ello y saben que juegan con el factor afición a su favor. Con todos estos ingredientes, sabiéndolos mezclar, llegará un plato con buen sabor.

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