El hostelero benaventano Ángel Villar se ha visto obligado a acudir al Juzgado de lo Contencioso contra las denuncias interpuestas por el Ayuntamiento al ocupar la vía pública con mesas y sillas en el recorrido del Toro Enmaromado del pasado año, entendiendo que sigue sufriendo un acoso por los responsables municipales.